Los beneficios de la aprobación en bloque

Creo que “discusión en bloque” es un oxímoron, pero bueno, por ahora preferí dejar el escepticismo por una vez y probar un poco esto de la “discusión/aprobación en bloque” de algo.

Siempre he sido un tipo democrático, hasta que aparece un idiota que me empieza a llevar la contraria. Allí sí que se me van los papeles y comienzo a soltar cachetones. Pero decidí darle un chance a esto de la ‘democracia’, ya que en los cuarenta años anteriores resultó ser que no habíamos tenido nada de eso sino un simple teatro piche, (inteligentsia chavista dixit).

Llegué a mi casa contento, dispuesto a pasar mi ‘reforma’ por el parlamento. Como soy poco creativo y la verdad que tampoco había mucho que cambiar, redacté tres artículos, para someterlos a la Asamblea:
Artículo 1. El abajo firmante se compromete, en aras de mejorar el funcionamiento del hogar, a lavar los platos todos los días de la semana laboral, sin excepción, sin que esta tarea exceda las seis (6) horas diarias.
Artículo 3. El abajo firmante se compromete a no interrumpir más a su compañera y también abajo firmante en las reuniones femeninas con comentarios tipo ‘Brad Pitt es un ignorante’ o ‘Johnny Depp es disléxico’ o poner discos de Tool durante las noches antes mencionadas.

¿Y qué pasó con el artículo 2? -se preguntarán. Pues lo colé entre el uno y el tres, y decía:
Artículo 2. Los abajo firmantes se comprometen a sostener, dos veces por semana, sendos menage à trois, o tríos, con compañeras celosamente escogidas exclusivamente por el abajo firmante.

La Asamblea, en procedimiento democrático, discutió los artículos en bloque. Fue un excelente ejercicio soberano que dejó como resultado cinco platos rotos y varias noches pasadas en el sofá de la sala por parte del abajo firmante. Parece que la Asamblea también tenía derecho a una desobediencia civil 350, según la antigua constitución.

¿Cómo terminó todo? Digamos que por lo menos más nunca tendré que lavar los platos y que ahora se escucha Tool a toda hora… Una fiesta soberana, pues.

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