Ante los urinarios (Primera parte)

Experiencias en un baño público masculino.

Asumo la posición de costumbre, en el trono de mármol que se abre ante mí. Es algo desconcertante -reflexiono a nivel del cierre- el coincidir en un acto tan privado. Las mujeres son totalmente opuestas a nosotros en lo que a esto concierne: ellas buscarán y hasta rogarán a una amiga que las acompañe. Los hombres, frente al urinario, coincidimos, y esto no sin algo de desgracia.


Cada quien en lo suyo...

Siempre con un puesto de por medio…

Ahora bien, remarque el atento sociólogo de la micción que la proxemia es un factor sumamente importante cuando nos izamos, más de uno a la vez, frente al colmillo abierto del urinario. Porque jamás, por más pana que sea el amigo que coincidió fortuitamente con nosotros en el baño, se escogerá el urinario inmediatamente contiguo al nuestro. La regla indica que el usuario debe preferiblemente dejar por lo menos un puesto intercalado. No vaya a ser. ¿No vaya a ser qué? Nadie sabe, pero esa es la norma: Sólo se puede quedar con alguien al lado cuando no haya opción, cuando sea imposible intercalar urinarios. Al final, no sé quién rayos diseño los baños, porque en todos los que entro, los urinarios están demasiado pegados. Nuestros gobiernos conservadores, tan preocupados siempre de que los muchachos no jueguen espaditas y terminen gays, tampoco es que le hicieron un favor al varón confundido sexualmente al poner los urinarios tan cerca los unos de los otros.


“Urinario del Ego”, la nueva moda…

Pero una vez que el itinerante viajero del WC coincide, por azar u otra razón, con un amigo ante el urinario, hay dos tipos de personalidad que se ponen de manifiesto: “el callado” y el “conversacionista”.


Continuará…


(Lea la segunda parte)

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2 Responses to Ante los urinarios (Primera parte)

  1. Stokma says:

    esta muy bueno lo del puesto intercalado (definitivamente es una regla) lo mas arrecho es que eso no lo aprendemos en ningun lado, es algo instintivo y ya… lol hablando de locura urinarias, en el bar de un amigo en paris (la cometa) el urinario (unico en el local) esta en la planta de arriba justo al lado de la puerta de la cocina… lo curioso es que aqui no tienes pa donde cojer si el baño esta ocupado solo te queda esta opcion.. mientras las mesoneras observan todo el espectaculo con sonido de catarata incluido… al menos hay una parte buena para ellas, pueden decidir con cual de los clientes salir y no llevarse un fiasco jeje.. saludos bro.. feliz dia del blogguer… estas entre mis recomendaciones del dia!

  2. Troka says:

    Para mi éste siempre ha sido un tema interesante…un mundo al que no tenemos acceso las mujeres, un código de conducta que nos es completamente ajeno y desconocido…siempre me pregunto: cómo se comportan los hombres cuando van al "baño de hombres".
    Hasta pronto!

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