Last exit to Cairo!

Notas egipcias (parte 9 de 9)
Cairo
¡Lo logramos!
02/03-Cairo
2.30 am.
Madrugada. Nos arrancamos de las cobijas para tomar un avión al Cairo, última destinación de la aventura egipcia. Bien dijo alguien que lo mejor se deja “para de último”, tenía razón. Llegamos a la capital a las seis de la mañana, y pasarán dos horas antes de que podamos reclamar las maletas y montarnos en el autobús. Pas de panique: a pesar de estar algo cansado por el ajetreo de los últimos días, tengo la cabeza llena de interrogantes que no me permiten dormir. Me asomo por la ventana, confundido sobre el itinerario del día y ahí lo veo: La explanada de Giza, con sus pirámides, Kheops, Khefren y Micerinos. Siento algo de angustia y excitación.
Estoy parado en la base de la pirámide de Kheops, la más grande. El viento constante lanza coletazos de arena por doquier, pero yo sigo ahí, tratando de asimilar todo. Toco las viejas rocas apiladas al parecer de manera azarosa y caótica, el tiempo deja su huella. Nadie creería lo inmensas que son estas construcciones. Incluso un astrónomo moderno tendría problemas para hacer los cálculos y lograr que la pirámide reciba al sol directamente en el solsticio de verano. Las fotos aéreas impresionan aún más por la precisión que demuestran en los cálculos. Tal vez lo más impresionante sea lo destartaladas que se ven las pirámides en un close-up. Estaban recubiertas con arena y cal, lo cual le daba un aspecto más uniforme que el de hoy en día.
Las pirámides llevaban sólo treinta años para ser construidas. Diez para transportar las piedras desde Asuán, veinte para colocarlas y seis meses para recubrirlas de cal. De hecho, la pirámide de Khefren (la del medio) todavía tiene rastros de cal.
Después de explorar un poco, logro entrar en la pirámide de Khefren. Realizo el viaje astral de los faraones, a través de un túnel que baja para enterrarse en la tierra, luego avanza recto y finalmente sube hasta entrar en la cámara donde está lo que queda del sarcófago del faraón. Es un cuarto pequeño donde no hay nada, las mentes débiles se sienten estafadas al estar en la pirámide. No es para todo el mundo. Tocando las paredes siento toda la estructura respirar, como si estuviera viva. Es fascinante pensar que aquí se evaporó, sin dejar rastro, el faraón. La momia de la pirámide de Kheops nunca fue encontrada, como ya sabrán. Los arqueólogos siguen buscando, arguyendo que está escondida entre las paredes de la pirámide pero, ¿para que negar lo obvio? El faraón se fue, llevándose sus trapos consigo.
Salgo de la pirámide y miro atónito esta gigantesca puerta astral que ha maravillado generaciones enteras. Cuando entras a una pirámide, algo pasa dentro de ti. Nunca serás el mismo. Has participado a la experiencia, has vislumbrado un ápice de la inmortalidad.
Todo lo demás no será sino un pie de página a esta experiencia. Si alguien pensó que las pirámides eran una obra de ingeniería o fruto del azar, basta con ver la esfinge para darse cuenta de que una cosa es “apilar rocas” si alguien es tan bruto como para ver las cosas así, otra muy distinta tallarlas para dar una esfinge gigante.
Me lleva algo de tiempo asimilar todo. Luego de ir al museo del Cairo, caminamos por el mercado del Cairo, donde fumamos pipa otra vez. Me dan algunas impresiones y sensaciones extrañas, no gracias al tabaco de la pipa sino debido a toda la experiencia.
En la noche, cansado, tomamos el avión de regreso a París. Creo que he logrado entender mucho, tal vez demasiado, sobre la fascinación egipcia por el más allá. Hay cosas que se viven y se ven y quedan plasmadas para siempre en el continuo del tiempo y el espacio. Ése es el secreto de la inmortalidad que entendió el faraón antes de esfumarse. Se llevó hasta su momia. Como bien dice el dicho, “sin los ojos se puede vivir, pero no sin la cabeza “onde están los ojos”.
Yo no necesito momia. El eterno retorno me agarrará sereno y confesado. Cuando vas a Egipto, las cosas toman otro color. No sé qué pasará con mi vida ni dónde voy a estar dentro de unos meses; pero si algo sé es que por más que todo cambie, por más que me quiten mi apartamento o todas las cosas tangibles de mi vida, nadie podrá NUNCA quitarme la sensación de infinito que presencié al estar delante de una pirámide. ESO es mío. Lo demás, el poco dinero, la ropa, los videos; eso se los dejo. Me llevo a mi tumba lo mío.
Ese es el sentido de la verdadera libertad.
Se despide,
Vicente.
¿Otra?:
Estupendo final Vicente.. sabes queria continuar comentando sobre faraones y maldiciones egipcias.. pero al terminar de leer esto, mi mente quedo volando y ahora siento mas ganas de ir a conocer ese enigmatico pais.. (a ver si consigo respuestas)…. por cierto dans l´institut du monde arabe hay una exposicion de faraones muy interesante.. la visite en diciembre cuando estuve en paris.. y si mal no recuerdo estara abierta hasta el 30 de marzo… esta muy bien realizada y venden libros interesantes sobre lectura de geroglificos… aunque pensandolo bien probablemente sea una presentacion de marionetas para alguien que regresa de ver las piramides..lol
Saludos amigo,
STOKMA
Muy buenas fotos y comentarios. Se nota que fue una nota…
Las fotos de las ciudades, sus calles y mercados me parecen tambien muy muy interesantes. Y bueno, esa naturaleza uff con ese cielo de pelicula, esa luz que tan bien retratastes y ese desierto hogar de esas ruinas remarcables…
Tu relato es una invitacion obligada al viaje !
Muy bueno, reportero del propio yo, creo que de esa forma se respira mejor las imágenes que vistes.
Gracias por compartirlas de manera amena y sencilla, de esa forma no llegan a ser nunca clorofórmicas y te mantienen, por el contrario, en espera de la próxima.
Como dice Stokma… que final pana! Nada como viajar… eso no te lo quita nadie! Y mas ver algo de este tipo… Si solo leer algunas partes y ver algunas fotos te quita el aliento.
gracias por el viaje…
Hola mi nombre es Ricardo Calo.Soy Pintor. Mis ultimos trabajos están en http://www.picassomio.com/Ricard... Mis intereses son muy variados,pero los que tengo más claros tienen que ver con el Arte y la literatura. Amo los viajes por el mundo. El último viaje fue a Egipto,allí el tiempo transcurre más lento.Llevaba tres días y me habían parecido ocho o puede que más y eso le ocurría a todos los viajeros por lo general. Viviamos sin televisión, contemplabamos el cielo y la arena del desierto y los grandes monumentos arquitectónicos. Pero lo más hermoso fue nadar en el Nilo y al lado las arenas del desierto y los camellos. Subi en uno por espacio de treinta minutos fue suficiente; pero la experiencia más fuerte y poderosa fue bajar a la piramide de una reina y a la de un faraón… Mientras tanto los niños eran verdaderamente felices y los juguetes tenían que ver con la naturaleza y el ingenio, fue muy hermoso y espero volver…
Estuve donde tú has estado y no lo olvidaremos nunca , verdad
Tengo un montón de filmaciones, y estoy a la espera de algunas fotos, viajar, viajar, viajar esa es la cuestión…
Saludos cordiales:
Mi otro Blog:
dentrodeunagujeronegro.bi…
Gracias
Muy bonito gracias.
Brother,
burda de bueno.
Gabriel
Vincent: Me gusto mucho leer tus comentarios y ver las fotos del viaje. Me dieron ganas de ir a Egipto. Muy Buen Final !!!!!!!!!!!!
En el Ecuador existen las pirámides truncas de cochasqui que forman el calendario solar mas grande del mundo.
Al amanecer del solsticio del 22 de diciembre las sombras de ellas se alinean entre sí.
Demostrandonos el conocimiento del tiempo por medio del espacio en sus rampas .
Quienes fueron ? sera la pregunta que no descubro en estos ultimos 10 años de investigación.
GRUPO ARTE BOURI